En el momento en el que obtenemos por fin el carné de conducir, seremos conductores nóveles y, entre otras características, será obligado que llevemos la “L” en la zona trasera del vehículo, para alertar a los otros conductores de que somos novatos en la carretera.
La L la tiene que llevar cualquier conductor novel en el momento en el que obtiene el carné, independientemente de la edad que pueda llegar a tener. Hay que llevarla durante un año.
Si en ese periodo de tiempo, por las razones que sean, no llevamos la L y nos para la policía, nos enfrentaremos a una determinada multa, y no va a ser precisamente pequeña.
Sigue leyendo para saber el resto de información pertinente sobre la colocación de la “L” en el vehículo.
¿Dónde se tiene que llevar?
La “L” tiene que ser colocada en una parte del vehículo dónde consiga la máxima visibilidad; de esta manera, se establece que se tiene que ubicar en la parte izquierda del vehículo. No debe de ir por fuera jamás ya que no tardaría en salir volando.
Lo más habitual es utilizar su sistema de sujeción mediante ventosas, colocado por la parte inferior. Sin embargo, existen algunas quejas al respecto ya que, dependiendo de la ventosa, es posible que el cristal pudiera llegar a tener una marca permanente.
Existe una excepción y es en las motocicletas, así como en los vehículos para personas de movilidad reducida de 3 ruedas. En este caso, la señal tiene que ir colocada en cualquier lugar visible de la zona trasera del vehículo, pero realmente no importará la ubicación en si.
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